UN MUJER SE CURA DEL SIDA TRAS UN TRASPLANTE DE CÉLULAS MADRE DEL CORDÓN UMBILICAL
La curación definitiva del sida parece estar cada vez más cerca. Según ha informado la agencia Reuters, una neoyorkina con leucemia se ha convertido en la primera mujer, y la tercera persona hasta la fecha, en curarse del VIH después de recibir un trasplante de células madre de un donante que era resistente al virus que provoca el sida.
Los dos casos anteriores eran dos hombres con leucemia que también se curaron del sida gracias a un trasplante células madre procedentes de médula ósea, que son células madre adultas y se usan con mayor frecuencia en este tipo de trasplantes. En el caso de la paciente neoyorkina, se ha utilizado sangre del cordón umbilical.
MÁS DE UNA AÑO SIN EL VIRUS
La paciente de Nueva York sufría leucemia mieloide aguda, un tipo de cáncer que se origina cuando la médula ósea produce grandes cantidades de células sanguíneas anormales, ya sean glóbulos rojos, glóbulos blancos o plaquetas. También tenía el sida.
- Recibió la sangre del cordón umbilical para tratar su leucemia mieloide aguda hace 14 meses y, desde entonces, ha permanecido asintomática y no necesita tomar antirretrovirales.
Actualmente las personas que tienen el VIH deben tomar a diario el tratamiento antirretroviral porque su sistema inmunitario no es capaz de controlar el virus espontáneamente
SANGRE DEL CORDÓN UMBILICAL
El caso de la paciente neoyorkina, así se la conoce para preservar su privacidad, forma parte de un estudio más grande dirigido por la Dra. Yvonne Bryson de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) y la Dra. Deborah Persaud de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore.
El estudio pretende seguir a 25 personas con VIH que se someten a un trasplante con células madre extraídas de la sangre del cordón umbilical para el tratamiento del cáncer y otras enfermedades graves.
Los pacientes del ensayo primero se someten a quimioterapia para eliminar las células inmunitarias cancerígenas. Luego, los médicos trasplantan células madre de personas con una mutación genética específica que hace que carezcan de los receptores utilizados por el virus para infectar las células, es decir, son resistentes al VIH.
SISTEMA INMUNE MÁS FUERTE
Después de recibir el trasplante, la persona desarrolla un sistema inmunológico resistente al VIH.
Recordemos que el VIH ataca el sistema inmunitario, en concreto los linfocitos-T CD4. La función principal de estas células es la de alertar al propio sistema de la presencia de patógenos o de una replicación errónea de células humanas.
Al debilitarse el sistema inmunitario, la persona infectada tiene más riesgo de morir por infecciones, cánceres…
El objetivo de los tratamientos antirretrovirales es impedir que el VIH se multiplique, lo que permite al sistema inmunitario recuperarse y producir más linfocitos T CD4.
TERAPIA GÉNICA PARA CURAR EL SIDA
A pesar de que el caso de la paciente neoyorkina es una muy buena noticia, Sharon Lewin, presidenta de la Sociedad Internacional del SIDA, ha reconocido en un comunicado que los trasplantes de médula ósea no son una opción que esté al alcance de todos los enfermos de VIH.
De todos modos, el estudio deja claro que la terapia génica sí funciona: trasplantar células madre de personas con mutaciones genéticas que los hacen resistentes al sida logra curar la enfermedad.